El Opera & Ballet State
Theatre – Tbilisi - Georgia, inaugurado en 1851, es todo un
símbolo de cultura georgiana. Ya desde sus primeros años,
está sólidamente unido a las grandes figuras del ballet
clásico mundial.
Bajo la dirección artística de Nina Ananiashvili desde 2004,
quien fue primera bailarina del Bolshoi de Moscú durante
casi dos décadas y del American Ballet Theatre de Nueva York
durante 16 años, el Ballet del Teatro Estatal de Ópera y
Ballet de Georgia, ha alcanzando desde entonces nuevas cotas
artísticas, recuperando la importancia que tuvo desde sus
comienzos. Nina Ananiashvili, aceptó la petición del
presidente georgiano Mijal Saakavshvili y se hizo cargo de
su dirección, renaciendo el antiguo esplendor de esta
formación artística, gracias a su esfuerzo, tesón y
reconocido talento que ha puesto al servicio de esta
institución georgiana, que realiza giras artísticas con las
que llevan a los escenarios de todo el mundo las mejores
coreografías clásicas.
Cascanueces es un ballet en dos actos y cinco escenas basado
en el cuento de Ernst Theodor Amadeus Hoffmann “El
cascanueces y el rey de los ratones”. Estrenado el 17 de
diciembre de 1892 en el Teatro Mariinsky de San Petersburgo.
Posteriormente Tchaikovsky compondría una suite orquestal
inspirada en su propio ballet, tomando sobre todo
movimientos del segundo acto.
En los países occidentales, Cascanueces se ha convertido
quizá en el más popular de todos los ballets, ya que en la
lista inmensa de creaciones de este periodo, basta con
recordar las tres obras supremas de Tchaikovsky, columna
vertebral de todos los repertorios clásicos: El lago de los
cisnes, La bella durmiente y Cascanueces.